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Baile de El Catre

  • El Baile del Catre, en realidad, se lo debemos al Gran Claus, que fue quién lo trajó desde Valladolid.

    Como podeis observar en la animación de la derecha, el baile consiste en desplazar una de las manos en diagonal de derecha a izquierda y de arriba a abajo en curva, algo así como si estuvieramos sacudiendo una alfombra, mientras la pierna contraria a la de esta mano se dobla ligeramente para adelante y luego para atrás, la otra mano iría estirada y para el frente como si estubieramos apoyados para mear.

    Todo esto con un leve movimiento de cadera y lo más importante girar la cabeza de una lado para otro con expresión gozosa.

    El baile se hizo popular no solo entre los componentes del Catre, al final de las fiestas era poosible ver a gente de otras peñas o de la propia Orquesta bailarlo.

    Podemos decir que este fue el auténtico baile del verano en Vilvestre.

Historia del baile por Claus

Ahora os voy a contar la historia del baile que creo se remonta al año antes de irme a Inglaterra en el invierno del año 1999. Había salido un jueves de fiesta con unos colegas y habíamos ido al bar de un colega.

En esto que después de un buen rato aparecen por el bar los jugadores del Valladolid, sobre todo los jugadores de color que había por aquella fecha con sus mujeres o respectivas parejas.

Ya en el bar solo quedabamos mis colegas y cuatro pelagatos más. Es mas incluso los jugadores nos quisieron invitar a unas copas por aquello de la soberbia pero eso es otra historia. A los hechos: En fin que el bar era como un sótano al que había que bajar unas escalera, entonces a la mujer o pareja o vete a saber qué de Harold Lozano se le habia desatado un zapato y se dió la vuelta para poner su pie en un escalón y atarse el zapato, en el momento que aprovecho para poner su brazo izquierdo estirado con la mano en su espalda y acercarse sigilosamente por detrás con sus partes salientes con un pequeño moviento pelvico y golpearla el culete con la mano del otro brazo, como comprenderás nos quedamos atónitos a la vez que no pudimos más que escojonarnos de risa. Y desde entonces............ pus va! pus va! pus va!.

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